Serigrafía, tampografía, bordado, sublimación… en la actualidad existen multitud de técnicas de impresión, todas con sus múltiples utilidades y ventajas. Esto es verdad que proporciona una inagotable fuente de recursos, pero a la vez también trae quebraderos de cabeza ante la idea de tomar una decisión entre una u otra.
Para ayudarte a elegir la mejor técnica de impresión en lo que a productos publicitarios compete, consultamos con los expertos en técnicas de impresión de Algrama. Sigue leyendo y entérate.
Serigrafía
Comenzamos por la serigrafía al ser la técnica de estampación más conocida y empleada por la mayoría de las empresas.
Se trata de un método muy económico, ideal para grandes tiradas. Mediante esta técnica la impresión se realiza transfiriendo una tinta a través de una malla tensada en un marco, y se estampa color por color, y por último, se traslada a la máquina de secado.
No obstante, para más cortas, se recomienda utilizar técnicas de otro tipo, como láser, debido al coste fijo de la plancha por su puesta en marcha, lo que encarece las producciones de menores cantidades.
Tampografía
En el top de la popularidad sigue la tampografía. Una técnica económica, duradera y con una definición magnífica, que consiste en la transferencia de tinta al producto usando un tampón de silicona o caucho.
Una placa metálica o plástica, revestida de una emulsión fotosensible, sirve como lienzo para grabar la imagen por medio de un proceso químico, formando un huecograbado. Esta placa es cubierta de tinta y barrida por una cuchilla, y posteriormente un tampón de silicona presiona sobre el grabado de la placa recogiendo la tinta del huecograbado y transportándola sobre la pieza que será impresa por contacto.
Una de las grandes ventajas de esta técnica es la gran definición que aporta y la rapidez del secado de las tintas, lo que permite que se puedan imprimir varios colores consecutivamente. Además, es ideal para producciones en grandes tiradas.
Permite transferir una imagen sobre superficies cóncavas, cilíndricas e irregulares, además de superficies planas, gracias a las propiedades de los tampones de silicona. Además, es ideal para imprimir en piezas pequeñas ya que se logra una mejor calidad en detalles pequeños. Su técnica hace que la impresión sea altamente fiel al diseño, y además es duradera en el tiempo.
Sin embargo, en productos metálicos no tiene tanto agarre, por lo que para este material se recomiendan técnicas láser.
Grabado láser
Ya que la hemos mencionado varias veces, hablemos ahora de la grabación por láser Esta es una técnica que no necesita contacto para realizar el marcaje y que suele ser empleada en superficies como madera, metal, piel, vidrio o goma.
Su tecnología permite marcar los detalles con máxima precisión, dando un toque exclusivo, elegante y duradero.
Durante su elaboración se erosiona la superficie: Primero se prepara el producto en cajas y se limpia, después se fija el producto para que no se mueva y por último se introduce en la máquina de estampación láser. Por último, el resultado son productos personalizados de apariencia muy profesional con un marcaje casi imborrable.
La única limitante que tiene es que con esta técnica no se puede estampar el producto con colores, ya que el color resultante es el que aparece tras erosionar la primera capa del objeto.
Sublimación
Llegó el turno de la bien conocida sublimación, la cual es una técnica de impresión ideal para prendas deportivas, como en el caso de las camisetas técnicas, ya que no tapa el poro del tejido y permite la transpiración.
El proceso consiste en transferir una impresión hecha sobre un papel especial a un artículo, lo cual se logra gracias a una plancha térmica que aplica calor sobre el transfer, hasta alcanzar la sublimación.
Con esta técnica, la impresión no tiene tacto y es transpirable, lo que permite lucir el diseño sin la sensación de tener una pegatina pegada. Por otro lado, la calidad fotográfica es óptima y su impresión pierde menos calidad con el paso del tiempo. Además, es la técnica ideal para impresiones de muchos colores o marcar fotografías, para sublimar por completo tu producto o para superficies grandes.
Eso sí, siempre se recomienda que los fondos sean blancos para que el color se adapte al máximo.
Bordado
El bordado es una técnica de personalización textil en la que el diseño a realizar se digitaliza con un software de diseño de perforación mediante el que la máquina lee el patrón y mueve sus agujas de forma automática para definir el diseño programado.
Es una técnica que ofrece acabados de gran calidad y aporta un toque distintivo al producto final. Además, es muy duradero. Por lo mismo, se recomienda mucho para clientes que buscan obtener un producto de calidad alta y con una personalización que se le ajuste.
Por otro lado, el precio varía según la densidad del logo y la cantidad de hilo que se utilice y no de los colores empleados, por lo que nos permite hacer los ajustes necesarios para poder encajar en nuestro presupuesto.
Transfer digital
El transfer digital es una técnica que imprime directamente sobre el soporte del diseño, en formato vinilo, y se acopla a la prenda a personalizar con aplicación de calor. Cuando el vinilo entra en contacto con el calor, se fija la prenda textil, todo mediante una plancha.
Así, es un método de personalización que solemos utilizar para logotipos de muchos colores, ya que proporciona un marcaje de óptima calidad fotográfica del diseño.
Transfer cerámico
El transfer cerámico, como su nombre nos indica, es un método de estampación de alta calidad para materiales como vidrio, cerámica y porcelana.
Mediante esta técnica de impresión el logo se estampa en una calca y esta se adhiere al artículo que posteriormente se cuece en unos hornos especiales a temperaturas de unos 800 grados centígrados.
Es un método muy utilizado cuando se quieren hacer estampados en, por ejemplo, jarras de cristal, vajillas de cerámica y sobre todo, para las tan demandas tazas personalizadas. Esto también porque una de sus grandes ventajas es que permite el uso de lavavajillas y microondas sin que afecte a la estampación del producto, la cual apenas sufrirá desgaste.
Termograbado
El termograbado es una técnica de impresión térmica en la que se utiliza un troquel de metal con la forma del diseño a estampar. Se imprime por medio de calor y presión sobre el artículo produciendo un relieve con la forma del diseño.
Este sistema se utiliza en materiales modificables como piel, tela, cartón, madera y plástico, entre otros y es muy recomendada para clientes que, por ejemplo, buscan personalizar productos como las carteras de piel. En estos casos, los clientes quieren que su logo esté presente pero de forma tenue y elegante, y posicionar su marca de manera sutil, por lo que el acabado de gran calidad del termograbado consigue destacar la gama del producto, sumado a la durabilidad y resistencia a los lavados que ofrece.
Etiqueta digital
La etiqueta digital se realiza mediante un plotter de impresión y sobre un soporte autoadhesivo en el que se imprime el logo; luego de que se usa un programa informático para indicarle al ordenador el trazo de corte. Finalmente, una vez impresas y cortadas las etiquetas se adhieren al producto en la posición deseada.
Letterpress
Comenzamos a adentrarnos en técnicas de imprenta más nuevas, como en el caso del Letterpress. Esta se trata de una prensa que presiona el papel sobre el material a imprimir, controlando de este modo efectos de relieve.
Lo más curioso es que en el pasado se consideraba un error de impresión, mientras que hoy en día se ha puesto muy de moda y son muchas las empresas que la piden.
Cantos pintados
Siguiendo con el listado de técnicas novedosas, los cantos pintados nos muestra los cantos de nuestro producto de un color diferente al del papel utilizado, obteniendo de este modo un efecto muy visual que no dejará indiferente a nadie.
Troquelados
Bien sea a través del troquelado láser (para pequeñas cantidades o detalles) o del troquelado convencional, esta técnica nos permite perforar el cartón o papel obteniendo resultados sorprendentes.
Contracolado
El contracolado nos permite unir dos o más cartulinas entre sí obteniendo un producto único.
Impresión con tipos de madera
Esta técnica de impresión nació en el siglo XIX, coincidiendo con la industrialización y utilizándose para anunciar todo tipo de productos y servicios a través de la cartelería. Sin embargo, es en nuestros tiempos que ha cobrado importancia debido al auge de la tendencia vintage y la impresión tradicional.
Golpe en seco
Es una técnica de acabado que consiste en presionar el papel golpeando con un molde sin tinta, sólo con presión. obteniendo efectos de relieve sobre textos o dibujos.
Barnizados
Con esta técnica de acabado aplicamos un barniz sobre zonas específicas del papel, obteniendo efectos de brillo en algunas zonas.
Tarjetas transparentes
Se trata de una técnica de impresión en PVC transparente, el cual te permite obtener un resultado muy original que hará destacar tu tarjeta empresarial.